Volverá a amanecer, volverán los nervios, las ansiedades felices, volverá la ilusión, la emoción de los padres, la complicidad de los amigos, la familia reunida y la felicidad más importante, esa que es compartida.

Habrá lágrimas, emociones, muchas risas, infinitos abrazos, nuevas historias. El mundo no será el mismo pero con mucho esfuerzo y trabajo duro haremos que sea mejor.

Pronto el cielo brillará de un azul distinto, porque después de la tormenta siempre llega la calma. Y cuando todo esto pase, allí estaremos para disfrutarlo, vivirlo y ser felices junto a vosotros.

Pablo Canelones

Pablocane Photography